AgroCampanaNoticias

Desde el INTA defienden la inversión del Estado en ciencia: “Cada peso se multiplica por 11”

Fuente: Infocampo 06/09/2023 09:17:39 hs

El INTA, junto a la Universidad Nacional Arturo Jauretche, pondrán en marcha una Unidad Integrada para la Agricultura Familiar Periurbana, en Florencio Varela. La defensa del organismo que realizó su presidente, Mariano Garmendia.

El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Universidad Nacional Arturo Jauretche (UNAJ) firmaron el convenio de creación de la Unidad Integrada para la Agricultura Familiar Periurbana, que funcionará en un espacio de 950 metros cuadrados en la localidad bonaerense de Florencio Varela

El espacio tendrá como objetivo capacitar y profesionalizar a la agricultura familiar periurbana, realizar líneas de investigación situadas en el territorio y formar recursos humanos que tengan un perfil para trabajar con este sector.

El nuevo edificio posee características constructivas que habilitan el uso de la planta baja para el
público –debido a su carácter abierto– con lugares para exposición tanto permanentes como
temporales.

También permite contener las necesidades administrativas, vinculados al uso de oficinas
y espacios de investigación y a sus usos públicos, como espacio de relaciones del INTA con la
comunidad.

INVERSIÓN DEL ESTADO EN CIENCIA

En este contexto, el presidente del INTA, Mariano Garmendia, defendió la inversión del Estado en ciencia y su impacto positivo en la investigación vinculada al sector agropecuario.

Aunque no hizo referencia al respecto, pareció un mensaje indirecto hacia las críticas que recibió el organismo por parte del candidato a presidente, Javier Milei, y que le valieron hace poco una respuesta también de la vicepresidenta del INTA.

Cada peso invertido en el INTA se multiplica por 11”, sostuvo Garmendia, y agregó que esto se demostró a partir de un estudio que realizó el Centro de Economía y Prospectiva del organismo técnico.

También recordó que “el INTA es un actor relevante para enfrentar los desafíos del agro que se viene”.

“Desafíos en términos de adaptación al cambio climático, mejora concreta de la seguridad alimentaria y del desarrollo rural, incremento de la productividad y de la eficiencia agrícola, pero con respeto del ambiente”, puntualizó.

Durante el acto, Garmendia insistió varias veces con el valor de la ciencia y la tecnología pública, y su contribución al desarrollo del país; y destacó la importancia de trabajar en conjunto con los productores de alimentos para garantizar una mesa de alimentos sanos y accesibles.

“Hablamos del acompañamiento de cientos de técnicos del INTA a organizaciones, asociaciones y grupos de productores familiares a lo largo y ancho del país”, subrayó

EJEMPLOS HISTÓRICOS

Entre los principales desarrollos del INTA, desde su creación en 1956 hasta hoy, Garmendia amplió –en contacto con la prensa– sobre desarrollos de la institución que fueron resonantes, como la vacuna antiaftosa oleosa polivalente formulada por el científico Scholein Rivenson en 1970, que permitió extender el efecto inmunológico y sentó un antecedente mundial. “Los retornos económicos seguramente han sido relevantes”, señaló Garmendia quien consideró que la declaración de la Argentina como “país libre de aftosa con vacunación” –en 1997– se atribuye parcialmente a la disponibilidad de esta vacuna.

Asimismo, el presidente del INTA mencionó la obtención de la primera cepa vacunal contra la Leucosis bovina, virus que afecta fundamentalmente al ganado lechero en la Argentina, países de América Latina y el Caribe, de América del Norte, Europa Oriental y de Asia. Puede provocar una reducción en la capacidad reproductiva del rodeo, así como una pérdida de la capacidad productiva y hasta un 10 % de mortandad de los animales. “El desarrollo de la vacuna contra la Leucosis bovina es una investigación que llevó más de 10 años de estudio y en la que participaron investigadores del Instituto de Virología y de la Estación Experimental Agropecuaria Rafaela –Santa Fe– junto con especialistas de la Universidad de Liege –Bélgica–”, destacó Garmendia.

Si hay tecnologías que trascendieron las fronteras –en la historia del INTA–, la siembra directa y los silobolsas con todo el know how, probablemente lideren el ranking. “Ambas tecnologías fueron fundamentales y permitieron que productores argentinos den el salto productivo”, indicó Garmendia y añadió: “Desde el INTA acompañamos el desarrollo de estas tecnologías desde el inicio y, estamos orgullosos de que hoy, los silobolsas –por ejemplo– se exporten a más de 50 países”.

“En cuanto a la siembra directa, –enfatizó Garmendia– si bien todos saben que es una decisión agronómica que combina rotación de cultivos, fertilizantes y agricultura de precisión para aumentar la producción y preservar los recursos naturales, pocos saben que sus primeros pasos fueron ensayos que se realizaron en el INTA Marcos Juárez –Córdoba– en 1975”. Como dato destacado, Garmendia mencionó que “el ensayo de soja sobre trigo integra el ‘Calendario de la Revista de Agronomía’ de los Estados Unidos, que reúne los ensayos de labranzas más viejos del mundo”.

Seguir leyendo


Noticias recientes