Macri: “Es triste ver cómo no dejan trabajar al campo”
El ex presidente afirmó que el crecimiento que venía mostrando el sector desde 2015, está “detenido o en retroceso”. Dijo que el Gobierno solo lo considera un “enemigo” cuando es “un motor de prosperidad”.
El ex presidente de la Nación, Mauricio Macri, volvió a criticar al Gobierno nacional por sus políticas para el sector agropecuario, las que consideró que han “detenido” o puesto en retroceso los logros que se habían alcanzado a partir de 2015, año en que comenzó la gestión del líder de Juntos por el Cambio, hata 2019.
Lo hizo a través de una columna de opinión publicada en el sitio Infobae, bajo el título: “La rueda virtuosa del campo está frenada”.
“El proceso para el campo que habíamos iniciado en 2015, con mejores rutas y más trenes de carga, menos retenciones, menos trámites y más mercados para exportar, hoy está detenido o en retroceso. El Gobierno ve al agro sólo como una fuente de dólares a la que exprimir, sin valorar su potencial científico, su capacidad para generar cadenas de valor y de inserción federal”, cuestionó Macri.
Y citó a los aumentos de las retenciones y otros impuestos, al regreso del cepo cambiario y los cupos (y las prohibiciones) a la exportación y al exceso de regulaciones, “sumados a una innecesaria desconfianza y agresividad”, como los factores que “han detenido una rueda virtuosa que finalmente se había puesto en movimiento”.
REVOLUCIÓN DE LAS PAMPAS
Para Macri, hay una nueva generación de productores capaz de llevar adelante una nueva “revolución de las Pampas”, sin que necesiten nada del Estado a cambio.
“Sólo necesitan que los dejen trabajar. Es triste ver cómo ahora no lo están haciendo”, enfatizó.
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Desde su punto de vista, un ejemplo de la potencialidad que tiene el agro para consolidarse como motor de la economía argentina es que en los últimos 20 años se duplicó el área sembrada “cuando se eliminaron las juntas de granos y carnes”, se consolidó la siembra directa y se comenzó a exportar al mundo, lo mismo que se innovó con las silobolsas, el alimento para destete precoz, el trigo y la soja resistentes a la sequía, y las startups Agtech.
“Tenemos que reaccionar y retomar el rumbo iniciado en la década de los ‘90 y después en 2015. No lo veo posible con este Gobierno, que insiste en ver al campo sólo como un enemigo o una fuente de ingresos. Por eso debemos tener en claro que, a partir de 2023, no debemos ver al campo como nuestra rama principal de exportaciones (que también lo es), sino además como un motor de prosperidad, arraigo e innovación en buena parte del país”, mencionó el ex mandatario.
Y completó: “Como nos pasa con la energía, estamos perdiendo una gran oportunidad, desperdiciando tiempo mientras el mundo avanza y nos pone en bandeja la chance de ser líderes globales”.
PÉRDIDAS PRODUCTIVAS
Para Macri, el sector agropecuario necesita incentivos para seguir creciendo en la producción de granos: citó al respecto que la última campaña con datos oficiales, la 2020/21, cerró con 139 millones de toneladas producidas, una cifra similar a la de 2016/17 y por debajo de la 2018/19.
“Nuestra producción de granos está estancada, cuando podría estar explotando. Siguen siendo cifras importantes, que colocan al campo argentino entre los principales productores mundiales, pero muy inferiores a lo que podrían ser si le damos al campo las herramientas y el impulso para hacerlo”, puntualizó.
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Al respecto, citó el caso de Brasil, que no solo duplicó su producción de granos en los últimos 10 años, sino que también pasó de importar carne argentina a ser el principal exportador global.
“Este estancamiento no sólo impide o ralentiza el desarrollo de una parte importante del sector: también nos cuesta plata. Una mayor producción y exportación de granos permitiría el ingreso al país de decenas de miles de millones de dólares que serían muy útiles para aliviar nuestros problemas macroeconómicos (aunque no fiscales, porque sigo creyendo que en el mediano plazo las retenciones deberían dejar de existir)”, amplió.