Desde Agrofina recomiendan apostar por Alana, su nuevo herbicida de banda verde que utiliza dos modos de acción diferentes. Además, la firma lanzó dos graminicidas.

El control de malezas resistentes es uno de los temas que más le interesan al productor. Y eso se notó en el Congreso Aapresid, donde las empresas llevaron sus productos para garantizar una campaña con buenos resultados manteniendo el compromiso con el cuidado ambiental.

Tal es el caso de Agrofina, que cuenta con una de las paletas de herbicidas más amplias del mercado, que lanzó tres productos: Alana, un herbicida de banda verde pre siembra para el cultivo de soja para el control de yuyo colorado y rama negra; y dos graminicidas, que llevan una mayor concentración que permite la aplicación de una dosis menor, lo que se traduce en 150 toneladas menos de bidones de plástico en el ambiente.

En diálogo con Infocampo, el gerente de Desarrollo de Agrofina, Lisandro Guerrieri, resaltó que lo importante para darle batalla a las malezas resistentes es “rotar activos”, por lo que Alana es una excelente opción, dado que utiliza dos modos de acción diferentes. 

“También hay que buscar herramientas que no sean químicas, como rotaciones de cultivo, cultivos de servicio, distanciamiento entre hileras, prácticas culturales, ver fechas de siembra. Hay muchos aspectos que tener en cuenta”, destacó Guerrieri en relación a las Buenas Prácticas.

La firma avanza en soluciones para el rye grass resistente, que se calcula que está presente en unas 3 millones de hectáreas. “Para eso, tenemos un producto ya posicionado que lanzaremos el año que viene, que en realidad es una ampliación de registro. Es una mezcla de imidazolinonas“, adelantó el directivo.

En el sur, la maleza importante es el nabo resistente, para lo que Guerrieri recomendó Talis, con flurocloridona, que funciona muy bien.

“Paralelamente, venimos trabajando en nuevas malezas, vemos que hoy hay 36 biotipos resistentes. Se está sospechando el avance de rama negra”, afirmó.

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