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Inseguridad rural: las “perlitas” de un insólito robo de una casilla en San Antonio de Areco

Fuente: Infocampo 16/11/2022 16:46:51 hs

El reconocido asesor José Jauregui cuenta lo sucedido durante el fin de semana, cuando le sustrajeron levaron un trailer para hacer pruebas veterinarias. No les querían tomar la denuncia y el equipo apareció en un peligroso barrio del conurbano.

“En el grupo de Whatsapp que tenemos entre los integrantes de la empresa, el sábado muy temprano empezaron a preguntar, pensando que era una joda, ¿quién se había llevado el trailer de la empresa de la puerta de la oficina en San Antonio de Areco (Buenos Aires)”, le cuenta José Jauregui, reconocido asesor técnico y consultor ganadero, a Infocampo.

Justamente, Jauregui había sido, quien la noche anterior, la del viernes, junto a un colega, había estacionado la casilla itinerante de Tru-Test en la puerta de la oficina y veterinaria, luego de una jornada de trabajo. Él es parte de la empresa “Datamars”, empresa madre de Tru-Test.

Tranquilamente habían dejado el vehículo, el cual porta en su interior diferentes herramientas tecnológicas para hacer pruebas. A primera vista, no parece un vehículo que pueda despertar el interés de nadie ajeno al campo. Jauregui regresó a su casa en Esperanza (Santa Fe). Muy temprano, al día siguiente, empezaría la angustia.

SÁBADO

El colega que había viajado con Jauregui, que reside en San Antonio de Areco, pasa por las oficinas de la empresa con la intención de guardar el trailer. Ya no estaba. Conclusión: fue “hurtado”, para la ley vigente. La primera intención fue hacer la denuncia:

(Perlita 1) “La policía de San Antonio de Areco no quería tomar la denuncia por falta de sistema, alrededor de las 9 de la mañana”.

Al enterarse de esto, Jauregui toma dos decisiones: la primera, hacer la difusión del “hurto” en redes sociales. La segunda, hablar con su hermano, quien forma parte de la Fiscalía General de Mercedes (Buenos Aires), de la cual depende San Antonio de Areco. Se perdía tiempo valioso.

(Perlita 2) De esta forma, la policía local recién reaccionó, tomando la denuncia, cuando llamaron desde la Fiscalía de Mercedes, a las 15 horas. Ya habían pasado seis horas desde el momento en que se detectó el “hurto”.

Sin embargo, no fue el accionar de la policía lo que da con el paradero del trailer. Fue la tecnología.

(Perlita 3) “Desde el lugar en el que había dejado el trailer, una persona se contactó con la empresa porque escaneo el QR que tiene la casilla y mandó un mensaje. Avisó dónde estaba”, cuenta el asesor. Este contacto ocurrió durante la tarde.

De acuerdo a lo visto por las cámara de seguridad, a la casilla la levanta un automóvil alrededor de la 5 de la madrugada del sábado. “Con más reportes de cámaras de seguridad y la repercusión de la redes sociales, también tuvimos un aviso de que fue visto por la zona Zárate tirado por una pickup“.

¿Hasta dónde llegó? La casilla recorrió unos 150 kilómetros hasta el conurbano bonaerense, a la localidad de Virrey del Pino, en una zona muy insegura. Hasta allí, se movilizó la policía bonaerense, previo aviso desde San Antonio de Areco.

(Perlita 4) “Cuando la policía llega hasta al lugar, ni se mantiene cerca de la casilla y se queda, en custodia, a una distancia prudencial. El barrio en el que estaba es tan peligroso, que no querían permanecer cerca”, advierte Jauregui.

ROBO Y PERICIA

El asesor relata que la casilla apareció con faltantes y roturas.

“Forzaron la puerta para ingresar y rompieron unos apoyos traseros. Supongo que eso pasó cuando lo tirado el automóvil, que es más bajo que la camioneta. Además, estaba todo revuelto. Se llevaron un bastón lector de caravanas, un monitor para conectar a balanzas, más unas sillas, sombrillas y un toldo, que usábamos para armar la carpa que acompaña al trailer”, dice. El valor de mercado, estimó Jauregui, de lo perdido está entre 5.000 a 6.000 dólares oficiales.

“Lo más importante y lo que vale más, que es trailer, lo encontramos”, advierte.

¿Cómo termina la recuperación? Hasta donde habían dejado el trailer, llegó el representante de Tru-Test para Argentina para llevárselo. Como había denuncia de por medio, debían esperar a la pericia policial. Caía la noche del sábado.

“Pasaban las horas y el ambiente de un barrio peligroso del conurbano se ponía denso para todos los que estaban allí. Además, los equipos de peritaje de la policía son pocos y los fines  de semana tienen muchos siniestros y delitos. Eran las 21 horas del sábado y no había novedades de los peritos. Quizás podían llegar de madrugada del domingo”, recuerda.

De esa forma, para evitar dilatar los tiempos, Jauregui intermedió entre la policía en el lugar, la Fiscalía de Mercedes, en la que está su hermano, y la ayudantía de San Antonio de Areco para que se desestime la pericia y se pueda abandonar el lugar.

(Perlita 5) “No sé cómo es el lugar donde apareció la casilla, pero la policía me confesaba por teléfono que no podían permanecer ahí más allá de la medianoche por el riesgo y peligro de la zona”, afirma, El trailer se llevaron, finalmente, sin peritar.

“La Argentina que tenemos”, dice el asesor, con cierto lamento.

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