Coninagro, y productores lecheros y porcinos, se reunieron con autoridades nacionales para plantear estas quejas. CRA planteó que “el permanente cambio en las reglas de juego sólo genera más desconfianza”.

La Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe (Meprolsafe), la Cámara Argentina de Pequeños y Medianos Productores Porcinos, la Confederación General de la Producción (CGP) y Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), plantearon en las últimas horas, a través de diversas vías, su reclamo ante el Gobierno por las distorsiones que genera el “dólar soja” y las medidas perjudiciales tomadas por el Banco Central.

En primer término, una comitiva de Coninagro encabezada por su presidente, Carlos Iannizzotto, mantuvo un encuentro con el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo; el jefe de Gabinete de la Secretaría, Juan Manuel Fernández Arocena; y el subsecretario de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Territorial, Luis Contigiani.

“Le pedimos al secretario rebaja de impuestos. También se habló de la situación de la lechería y los temas impositivos en el plano vitivinícola , un encuentro federal propio de Coninagro donde hemos presentado alternativas que están faltando para tener más producción y que el sistema cooperativo pueda estar más fortalecido. En este contexto también se remarcó la disconformidad por las últimas resoluciones del Banco Central que consideramos que no son para nada oportunas”, expresó Iannizzotto.

Las medidas a las que hace referencia el dirigente mendocino son, en primer término, el aumento de tasas de manera diferencial para productores de soja que retengan más del 5% de su cosecha; y en segundo lugar, el reciente “cepo” que impide comprar dólares en el mercado formal a empresas que hayan comercializado su soja con el incentivo de un tipo de cambio de $ 200 incluido en el Programa de Incremento Exportador.

LAS DISTORSIONES DEL DÓLAR SOJA

El vicepresidente de Coninagro, Elbio Laucirica, fue en tanto el encargado de manifestar la preocupación del impacto que tiene el “dólar soja” en otras actividades que usan a los derivados de la oleaginosa como un insumo clave en la alimentación animal, como los tambos o la producción de carnes.

“De manera indirecta se perjudica a otros actores de la cadena y que no necesariamente son productores de soja, tal es el caso de los productores ganaderos o tamberos. Consideramos que las medidas son perjudiciales para el productor, tal cual expresa la nota enviada al secretario”, recordó Laucirica.

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En este mismo sentido, Meprolsafe, la Cámara que nuclea a los porcinos pyme y la CGP, mantuvieron un encuentro con el responsable de Relaciones Institucionales de la Secretaría de Agricultura, Jorge Solmi; del que participó también el director Nacional de Lechería, Arturo Jorge Videla.

“En un encuentro con otras entidades destacamos que por el desfasaje que produjo el dólar soja en estas semanas, se generó un desequilibrio en los números del tambo y de otras producciones”, precisó Meprolsafe en un comunicado.

Y prosiguió: “Desde las organizaciones de productores manifestamos vehementemente el gran desequilibrio que produjo el dolar soja, no sólo en los costos de alimentación, sino también en el costo de los arrendamientos”.

Ante la inquietud que se prorrogue la medida, Solmi ratificó que no se extenderá más allá del plazo original, ni se va a trasladar hacia otros granos.

Bajo este panorama, este jueves 22 de septiembre habrá una reunión  de las entidades representantes de productores en Arrecifes (Buenos Aires), “para unificar propuestas concretas, como alternativas para solucionar la problemática”.

En tanto, siempre según Meprolsafe, Solmi se comprometió que en la semana próxima habrá una nueva reunión para presentarle la propuesta y trabajar sobre la misma.

LAS CONTRADICCIONES DE LA POLÍTICA ECONÓMICA

Por último, CRA difundió un comunicado en el que cuestionó “las contradicciones de la política económica”, al hacer referencia al incentivo del “dólar soja” que luego se vio afectado por la suba de tasas del Banco Central y la posterior decisión de prohibir la compra de dólares a las empresas agropecuarias que vendieron su soja a $ 200.

“Ante todo, queda claro que se desconoce la estructura del sector agropecuario, donde muchos de los establecimientos productivos son personas jurídicas, y no personas físicas. Con lo cual, la medida cambia las condiciones del Programa de Incremento Exportador”, reclamó CRA.

También planteó su inquietud por la decisión del BCRA de extender hasta fin de año las restricciones a las importaciones, “aumentando la incertidumbre sobre el precio y la disponibilidad de insumos y fertilizantes importados”.

“Desde CRA nos preguntamos cómo se está coordinando la política económica, y que clase de señales se quieren transmitir desde el gobierno para restablecer la confianza de los productores, y de la población en general”, disparó la entidad.

Y finalizó: “El permanente cambio en las reglas de juego sólo genera más desconfianza, menos inversión, y, en definitiva, perjudica los incentivos para la siembra y la producción, y por ende la oferta futura de divisas de la próxima campaña, que ha sido el objetivo del gobierno con el Programa de Incremento Exportador”.

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