Sembrar trigo, una inversión 50% más cara que el año pasado
Según CREA, los fuertes aumentos de fitosanitarios y fertilizantes implican un aumento en los requerimientos de capital. Para soja, maíz y girasol se proyecta un incremento de entre 22 y 30%.
Los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA) difundieron su reporte de actualidad cuatrimestral, con datos a abril, en el que analizan la coyuntura que atraviesan las empresas del campo de todas las regiones y producciones, tanto extensivas como intensivas y regionales.
En ese marco, en el capítulo referido a la agricultura, CREA proyecta que la campaña 2022/23 requerirá una mayor inversión por parte de los productores, debido a la suba de costos muy importantes como los de los fitosanitarios –fundamentalmente, el glifosato– y de los fertilizantes.
MIRÁ En la última campaña, el trigo tuvo un salto tecnológico: ¿se repetirá?
“Para sembrar los cultivos en la nueva campaña, se requiere entre 20% a 50% más de capital que en 21/22, siendo los más afectados los cereales de invierno, donde el aumento en fertilizantes y fitosanitarios es en torno a 80% y las semillas cerca de 30%”, señala el informe.
Y añade: “Esto se debe a que los mayores incrementos en los precios de insumos sucedieron posterior a la siembra del ciclo pasado”.
SIEMBRA GRUESA
En cuanto a los cultivos de verano, el que asoma más perjudicado es el girasol, debido a un alza del 42% en las semillas, mientras que los costos generales para el maíz aumentan 25% y, para la soja, 22%.
No obstante, vale mencionar que todavía restan varios meses hasta que comiencen esas siembras, y hay variables que pueden seguir perjudicando la ecuación económica del agro.
“Teniendo en cuenta la problemática del combustible que se registra en plena cosecha gruesa 21/22, habrá que ver cómo evoluciona el costo de los servicios pesificados”, remarca el documento al respecto.
No obstante, difícilmente los granos gruesos sufran un aumento tan alto como el del trigo, debido a que parte de los incrementos que está sufriendo el cereal –sobre todo de fitosanitarios y fertilizantes– ya impactaron en la soja y el maíz de la campaña actual.