Gustavo Idígoras: “El agro también perdió una inversión como la de Petronas en Bahía Blanca”
El líder de CIARA CEC brindó un panorama sobre las inversiones en soja, y de la necesidad de una baja de retenciones para el sector. Coincidencias y desencuentros con la Casa Rosada.
Entre algunos de los varios pedidos que el ministro de Economía Luis Caputo se llevó de su visita al aniversario por los 170 años de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el principal fue el de “un marco impositivo razonable”.
José Martins, titular de la Bolsa volvió a poner el foco en la carga fiscal que enfrenta el polo agroindustrial, y especialmente los productores, que son los eslabones primarios de la cadena.
Sin embargo, los empresarios suelen ser quienes tienen el oído entrenado para escuchar las devoluciones de grandes grupos económicos que analizan el presente y el futuro de la Argentina para desembarcar con la billetera y traducirlo en inversiones.
El pasado, claro, también pesa y por eso hoy en día reina la cautela. Por eso el ministro volvió a pedir “paciencia” ante el auditorio.
Caputo, en la Bolsa de Cereales: “El Presidente es un atajo fenomenal hacia las inversiones”
Entre los presentes se encontraba Gustavo Idígoras, el presidente de la Cámara de Industrias Aceiteras de la República Argentina y el Centro Exportador de Cereales (CIARA-CEC).
Infocampo dialogó unos minutos con el vocero principal del polo oleaginoso, quien tiempo atrás había advertido con crudeza la parálisis en materia de inversiones y una carrera contra países competidores como Brasil y Estados Unidos en la que, desde su mirada, Argentina mira a los punteros cada vez más lejos.
Idígoras, hace dos meses, apeló a una comunicación a todo o nada. “Argentina es una jubilada de la agricultura y vamos hacia el fracaso total de la industria aceitera”, le dijo al sitio Rosario3.
LA PALABRA DE IDÍGORAS
-¿Cuánto hubo de susto real en la cadena para dar ese mensaje, y cuánto de recurso para lograr la atención hacia el sector?
-Hace un mes ya se preveía una baja importante el precio de la soja a nivel mundial, entonces me pareció prudente empezar a plantear la urgencia de tomar una medida. Y hoy, cuando uno ve los márgenes de los productores para sembrar en la próxima gruesa encuentra márgenes negativos.
-¿Qué dicen esos márgenes?
-La Bolsa de Cereales acaba de hacer un trabajo y demuestra que el 73% de los productores tendrían márgenes negativos.
-¿Estamos hablando de productores que arriendan campos o también incluye a propietarios?
-No, básicamente productores que alquilan, que es un porcentaje muy alto. Eso lleva a pensar sobre todo en un escenario en el que no va a haber un precio alcista y replantear, también, cuál medida se debería tomar para lograr cierta rentabilidad para que siembren. Y la medida natural es una baja retenciones.
-¿Cuál sería el porcentaje adecuado?
-Hicimos un estudio con la Bolsa y la propuesta bajar de 33% a 25%, unos 8 puntos. Con eso se podrían recuperar márgenes y lograr una expansión de superficie porque hoy el productor se siente un poco preocupado en sembrar maíz por la chicharrita, y si mira hacia cultivos de economías regionales tal vez no le sea tan sencillo llegar a los puertos. La soja, entones, tiene una oportunidad.
Reclamo del complejo sojero: “No se puede crecer con 33% de retenciones”
-¿A cuánto podría llegar una producción final?
-El estudio muestra que podría expandirse al menos unas 11 millones de toneladas, y pasar de los 50 millones actuales a 61 millones. Y ese crecimiento nos puede llevar a generar u$s 5000 millones para la Argentina, para el año que viene. Incrementales. Eso conllevaría una mejora del ingreso para el productor, nosotros mejoraríamos la capacidad de industrialización y exportación y el Estado ganaría en divisas.
-¿Cuáles fueron las repercusiones con los funcionarios, luego de aquella declaración?
-Bueno, el Gobierno que nos dice que “no seamos tan ansiosos”, que no es el momento.
-¿Y ustedes?
-Que para nosotros es “el” momento. Porque la caída de los precios internacionales va a llevar a un deterioro del flujo de divisas para el año que viene, y entonces hay que anticiparse porque el productor, una vez que sembró, ya no puede corregir. Este es el debate actual.
-¿Y cuál creés que es la situación que aguarda el Gobierno para efectuar medidas en este sentido?
-Hemos tenido varios encuentros para conversar, ellos entienden que la soja tiene un altísimo nivel de retención y que sería uno de los primeros cultivos en bajar, pero que aún no están en condiciones de hacerlo hasta tanto no logren una caída mayor de la inflación, una mayor estabilidad en materia fiscal y un presupuesto 2025 acorde con esa necesidad.
BIOCOMBUSTIBLES EN EL MUNDO
Hace dos años el polo del crushing argentino entró en alerta cuando desde Estados Unidos se anunció la profundización de su industria vinculada al “HVO”, el aceite vegetal hidrogenado.
Esa acción, entendían en aquel entonces, iba a decantar con el paso del tiempo en una merma fuerte en la exportación de harina de soja de la Argentina y un aumento en el interés por el grano sin industrializar.
Y que el combo, finalmente, sería un golpe letal para la generación de empleo de las plantas ubicadas principalmente en el Gran Rosario. En aquel entonces el propio Idígoras habló de porcentajes y señaló en materia de producción agroindustrial: “Brasil creció más de un 72% y Estados Unidos más de un 38% de producción”.
Sobre este punto Idígoras volvió a dar un panorama esta semana.
-¿Cuál es la foto actual?
-Estados Unidos sigue creciendo. El otro día en el Coloquio IDEA mostré un gráfico en el cual ese país en los últimos ocho años en producción de biodiesel, sobre todo de HVO, creció 140%. ¿Brasil? Un 170%.
-¿Y Argentina?
-Cero.
-¿Por qué?
-Perdimos u$s 27.000 millones en inversiones en el agro en materia de transformación y particularmente biocombustibles. A veces me ofusco, porque veo que la sociedad se pone atenta a lo de YPF y Petronas por la planta que se iba a realizar en Bahía Blanca, pero en cifras el agro perdió lo mismo. Y solo por la inacción.
-¿Esa falta de estado público es porque falta alguien que condense la atención?
-Totalmente. No es que es una o dos empresas que hacen la inversión: son 60.000 productores, 20 plantas, 25 puertos que es los que hacen una inversión en conjunto. Perdimos lo mismo que una planta como la que se nombró y ¿A dónde se fueron? a Brasil y Estados Unidos.
-¿Qué transmiten los inversores?
-Cada vez que nosotros intentamos convencer a alguien de invertir en agro en Argentina nos dicen “hasta que ustedes no demuestren varios años de estabilidad no vamos a volver a Argentina”. Y ese es un problema serio que hay que rectificar, porque si no vamos a ver crecer a nuestros vecinos y nosotros vamos a ir en una curva descendente.
-¿Las elecciones de medio término pueden ser un momento bisagra?
-Voy a repetir las palabras del ministro Caputo que dijo hoy, y que adhiero plenamente: Argentina no es creíble. Más allá de que hagamos excelentes presentaciones, que digamos lo que podemos hacer en el futuro, los inversores te dicen ‘hace 50 años que ustedes nos vienen engañando’. Entonces hasta que demostremos realmente que estamos trabajando en serio, no invertirán en Argentina.
-¿Pero el interés está?
-Sí claro. La cantidad de misiones empresariales del exterior que vienen a visitarnos se ha triplicado desde enero en comparación con los últimos dos años. Ahora, todos vienen a preguntar qué está pasando, pero no vienen a decidir cómo invertir. Para eso necesitamos más tiempo.