La Asociación de Granos de ese país estimó la cosecha en casi la mitad del año pasado y las exportaciones muy por debajo de lo previsto por el USDA. La soja cayó fuerte por toma de ganancias.

Con importantes mejoras cerraron los precios del trigo este lunes en los mercados de Chicago y de Kansas, como consecuencia de la continuidad de la guerra en Ucrania, que restringe el comercio y que limita las labores rurales, factor que continúa siendo el principal fundamento alcista para el cereal.

En Chicago ascendió casi U$S 11 para posicionarse en U$S 397,29 en la posición mayo, mientras que en Kansas sumó U$S 12,77 para llegar a U$S 419,43.

Un dato clave, según la consultora Granar, fue que la Asociación Ucraniana de Granos estimó en 18,20 millones de toneladas el volumen de la cosecha 2022/2023, por debajo de los 33 millones del ciclo anterior.

Mientras que pronosticó las exportaciones en 10 millones de toneladas, 14 millones por debajo de lo previsto antes de la invasión rusa y 9 millones menos que lo que proyectó el USDA la semana pasada.

“Además, la falta de humedad en amplias zonas de las Grandes Planicies trigueras, sobre todo en Kansas, sigue afectando el estado de los trigos de invierno, que evidencian condiciones entre las peores históricas para esta altura de la campaña, según lo informado el lunes pasado por el USDA”, analizó Granar.

Soja

En cuanto a la oleaginosa, una toma de ganancias generalizada tras las ganancias de la semana pasada llevó a los precios barranca abajo, con una pérdida diaria de U$S 12,40 y un precio para mayo de U$S 608,20.

“El rebrote de Covid en China, con epicentro en Shanghai, preocupa al mercado por la posibilidad de que el confinamiento de millones de personas y la paralización de sectores vinculados con la agroindustria acentúen la calma con la que viene operando la demanda china de soja e, incluso, por la chance de que provoque la cancelación de compras”, indicó Granar.

Además influye la posibilidad de que las bajas temperaturas previstas para estos días en las zonas agrícolas del Medio Oeste ralenticen la siembra del maíz, lo que llevó a los operadores a pensar que más tierras que las previstas por el USDA a fines de marzo podrían pasar a la soja.

Maíz

Con respecto a este cereal, los precios también cerraron en baja, pero más leve: U$S 1,67 en la posición mayo, hasta U$S 300,97.

“La caída del petróleo y las buenas perspectivas para la segunda cosecha de Brasil aportaron a las bajas y a las ventas de los especuladores”, mencionó Granar.

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