Zinc, el micronutriente clave para los cultivos argentinos
Adquiere más y más lugar en la agenda agronómica nacional como una limitante importante que puede llegar a definir entre ganar y perder.
A partir de 2016 y gracias a los trabajos realizados por la Asociación Civil Fertilizar, se logró demostrar que los campos argentinos tenían una seria deficiencia de zinc y que los cultivos respondían con muy buenos rendimientos cuando se les suministraba el nutriente.
En los primeros ensayos a campo, Fertilizar demostró que en el caso del maíz la respuesta era de aproximadamente 600 kilos por hectárea y el propio presidente de la Asociación, Jorge Bassi, explicaba en ese momento que ya no se podía hablar únicamente de NPKS, sino que había que agregarle la Zn porque “el Zinc es el micronutriente que más se ha deteriorado en estos últimos años en nuestro país”.
A partir de ese momento se dio un antes y después en la nutrición de los cultivos. Nuevos especialistas y técnicos comenzaron a prestar atención a los datos expuestos por Fertilizar, como el caso de Pablo Barbieri, perteneciente al INTA Balcarce, quien en 2017 realizó sus propios estudios y demostró que “la respuesta es generalizada y se manifiesta a nivel de rendimientos bajos y medios”.
Ya en 2018, el zinc ganó tanto protagonismo que en una visita a la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires, Lance Baumgard, profesor de la Iowa State University (EE.UU.), aseguró que por estrés calórico en el ganado, “la Argentina pierde 500 millones de pesos al año” y que aplicando “estrategias dietarias ricas en minerales como potasio y zinc se puede mitigar los efectos nocivos del exceso de calor”.
En ese mismo año y en AgroActiva, la siempre adelantada empresa argentina Rizobacter presentó un fertilizante líquido para corregir las deficiencias de Zinc, para tratamientos de semillas de trigo, maíz, sorgo y arroz, porque se había comprobado que en la Región Pampeana, los nuevos resultados ubican los niveles críticos por debajo de los cuales el zinc es deficiente, en 1.2 ppm.
Casi en paralelo, la empresa noruega Yara puso manos a la obra y lanzó un nuevo fertilizante en Aapresid. ¿Qué tenía de novedoso este nuevo insumo? Incorporaba el micronutriente zinc a la formulación tradicional del Nitrocomplex para corregir las deficiencias de la Pampa Húmeda.
Pero el zinc no es solamente una realidad necesaria para la vida de los cultivos, sino también para la de las personas. ¿Por qué? Porque según estudios “su deficiencia afecta a más de un tercio de la población mundial, principalmente a niños, adolescentes y embarazadas de países en vías de desarrollo”, siendo que es “vital para el crecimiento, el desarrollo del cerebro, el buen funcionamiento del sistema inmunológico, la digestión y muchas otras actividades esenciales del organismo”.
Ya en 2020, la firma Compo Expert recomendó un planteo agronómico con zinc porque según Edgardo Arévalo, gerente de Desarrollo de la compañía, “en una red de evaluación de análisis de suelos en 2011 se determinó que el 47% de los lotes tenían deficiencia de zinc. En 2018 la cifra ronda entre 67 y 70%”.
En ese entonces la firma lanzó un tratamiento a semilla a base de zinc llamado Nutriseed y un microgranulado que se aplica a la siembra, denominado Easy Start, que está reforzado con… Sí, adivinaron, con zinc.
Lo nuevo
En el día de hoy, otra empresa continúa el sendero que ya comenzaron muchas otras, y pone el acento en el zinc, porque Spraytec lanzó Topseed, un tratamiento de semilla para trigo y cebada que aporta el nutriente a la semilla
Para Agustín Bianchini, Coordinador Técnico de Spraytec, “el Zinc (Zn) es un micronutriente esencial para las plantas. Es un elemento constituyente de las paredes y las membranas celulares, participa en la activación de enzimas, con roles en síntesis de carbohidratos y proteínas, y tiene un papel clave en ayudar a la planta en su tolerancia al estrés y en el crecimiento reproductivo”.
TopSeed cuenta con “polímeros de última generación, y el agregado de Silicio (Si), que es un elemento esencial para las plantas y clave especialmente frente a situaciones de estrés”, amplió el profesional, aclarando además que “el Silicio protege a las plantas como un antiestresante biótico y abiótico”.
Queda claro, recorriendo todos estos años de investigación y lanzamientos de empresas, que la adhesión del Zinc al paquete nutricional NPKS es unánime. Nadie que tenga el dinero para invertir y que esté en su sano juicio pensará que este nutriente “es un cuento”, sino todo lo contrario, será el cuco o el héroe de las campañas que vienen.