Se plantea la incorporación de mayores desarrollos tecnológicos y la participación público privada en la consolidación y desarrollo de la herramienta de pronóstico.  BUENOS AIRES (NAP) El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de...

Se plantea la incorporación de mayores desarrollos tecnológicos y la participación público privada en la consolidación y desarrollo de la herramienta de pronóstico. 

BUENOS AIRES (NAP) El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Luis Basterra, junto al presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura, Martín Hinojosa, anunciaron este martes la conformación de una Mesa de Pronóstico de Cosecha que implicará una nueva metodología de cara a la estimación de las próximas cosechas del cultivo de la vid incorporando el aporte de otras instituciones públicas y privadas para obtener mayor precisión en el diagnóstico y sinergia al interior del sector.

“Luego de diversas reuniones y del trabajo coordinado entre las entidades que integran este Ministerio, gobiernos provinciales, entidades vitivinícolas, sector privado y académico, hemos definido como estrategia mejorar el pronóstico de cosecha, algo sumamente importante para la vitivinicultura”, dijo Basterra. “Este cambio, implica sumar entidades que puedan aportar sus conocimientos, su experiencia mejorando así una herramienta fundamental para la toma de decisiones”, añadió.

“En los últimos años el pronóstico de cosecha ha sido responsabilidad única del INV, hoy entendemos que hay que mejorar todas las herramientas con las que contamos, incorporando tecnología e innovación y más actores”, explicó el titular del INV.

El anuncio se presenta en paralelo con la conformación de una mesa multisectorial.

“La finalidad de esta mesa es que el pronóstico tenga mayor solvencia, una mirada integradora, a los efectos de obtener una herramienta lo más cercana a la realidad, incorporando principalmente la tecnología como gran aliado a la industria vitivinícola argentina”, amplió Hinojosa.

“El vino argentino sigue creciendo con calidad y buenos precios y tenemos que seguir acompañando con políticas que fomenten el potencial del sector”, destacó Basterra.

De acuerdo a los últimos datos brindados por el Instituto Nacional de Vitivinicultura, la exportación total de vinos en los primeros siete meses de 2020 superó los 237 millones de litros que representa un aumento del 46,3% con respecto a 2019. Se trata de la cifra más alta desde 2015 en las exportaciones de vinos totales para el periodo de 7 meses.

Basterra afirmó que “este escenario alentador para el sector, que adquiere aún más valor en el marco de la pandemia mundial, es acompañado de manera constante por la cartera nacional a su cargo y el INV con políticas activas, flexibilizando los análisis de exportación y ampliando las solicitudes de exportación a más mercados”.

Entre enero y julio de este año, se incorporaron 83 nuevos exportadores con 173.000 hl de vino que no habían exportado durante 2019.

Dentro de las claves para este histórico aumento está el tipo de cambio competitivo y la caída del consumo en hoteles, restaurantes y cafés (el llamado canal Horeca), a raíz de la situación que vivimos a nivel mundial. La pandemia a nivel mundial ha traccionado ventas de vinos de gama media y buena relación precio-calidad en el canal de proximidad y cercanía para vinos fraccionados.

También las exportaciones de mosto concentrado han crecido durante este período del año, llegando a las 76.097 toneladas.

Por otro lado, jugaron a nuestro favor situaciones de política comercial internacional. Así, impulsaron nuestras ventas al exterior la complicación que han tenido algunos países para comercializar sus vinos a causa del Brexit, los aranceles de USA y UE y restricciones en la venta de bebidas alcohólicas.

En este marco, Argentina ha mantenido la calidad de sus productos y con vocación emprendedora ha ganado dos puestos en el ranking de países exportadores de vinos, pasando de 11 a 9.

Ganar nuevos mercados es una de las mayores claves para que el sector en su conjunto pueda crecer, sobre todo teniendo en cuenta que el 59% de los viñedos del país son menores a 5 ha.

“La vitivinicultura es una cadena productiva con más de cuatro siglos de arraigo en nuestro territorio, que se ha ido extendiendo más allá de los “oasis productivos” de la región cuyana, principalmente de Mendoza, San Juan y La Rioja. Tenemos entonces el deber de seguir acompañándolos, motivando y fomentando el crecimiento de un sector conformado en su mayor medida por pequeños productores, que siguen generando orgullo y engrandeciendo nuestro país”, concluyó el Ministro.

Participaron del encuentro virtual además, el secretario de Alimentos y Bioeconomía, Marcelo Alós; el subsecretario de Agricultura de Nación, Delfo Buchaillot; el ministro Producción San Juan, Andrés Díaz Cano; el secretario de Agricultura Ganadería y Agroindustria del Gobierno de San Juan, Marcelo Balderramo; director de Asuntos Vitivinícolas de la provincia, Fioravante Da Rold; el vicepresidente del INV, Hugo Carmona.

Se sumaron, además, al encuentro la presidenta del INTA, Susana Mirassou; el director nacional del INTA, Carlos Parera; el presidente del INTI, Rubén Geneyro; el titular de UVA, José Alberto Zuccardi; de Fecovita, Eduardo Sancho; las presidentes de Bodegas De Argentina, Patricia Ortiz, y de – la Asociación Productores Zona Este Mendoza, Gabriela Lizana; Silvia Merida, a cargo del Centro Regional Aguas Subterráneas dependiente del Instituto Nacional del Agua; Claudia Quini y Leonardo Miranda del INV y delegados de la Unión vitivinícola Argentina.

En representación del sector académico estuvieron, Francisco Gómez de la Cátedra de Vitivinicultura Facultad de Ciencias Agrarias Universidad Nacional de Cuyo; y Luis Chiaramonte – ITU – Universidad Nacional de Cuyo; Gloria Tropea de la Facultad de Ciencias Alimentación de la Universidad Católica de Cuyo; y Maximiliano Battistella de la Cátedra de Vitivinicultura Facultad de Ingeniería Agronómica de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ), y demás representantes(Noticias AgroPecuarias).

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