Industria forestal: una salida económica y social para post pandemia
Es uno de los sectores que más potencial tiene para desarrollarse y generar empleo y divisas en el país. Según el Plan Estratégico 2030, puede captar inversiones por unos por 7 mil millones de dólares, logrando un incremento de las exportaciones en 2,6 mil millones de dólares y la creación de 186.000 empleos de calidad.
El sector foresto-industrial tiene amplias posibilidades de expandirse rápidamente y puede colaborar con un impacto positivo en empleos y divisas de manera inmediata. Las entidades que forman parte del sector, explican la posibilidad de generar inversiones, crear empleos y aumentar las exportaciones.
Recientemente se realizó el Plan Estratégico 2030 con amplia participación público-privada (disponible en http://www.afoa.org.ar/web/
Pero, además de ser un motor de crecimiento, el sector puede dar respuestas inmediatas de empleo con la expansión de las plantaciones forestales, la protección y gestión sostenible de bosques, la construcción con madera y otras actividades foresto-industriales, así como generar divisas a través de las exportaciones.
Empleo y divisas, dos factores imprescindibles para salir de la emergencia
Para ello, es necesario reactivar rápidamente el financiamiento provisto por las leyes de promoción de bosques cultivados y de protección y gestión sostenible de bosques nativos, promover la construcción con madera y facilitar la exportación foresto-industrial.
Un gran desafío es darle una rápida industrialización a la madera hoy disponible en las plantaciones forestales. Con 1,3 millones de ha plantadas, solo se industrializa la mitad de la madera disponible. Las posibilidades de expansión en agregado de valor son concretas.
La industria de la madera y tableros son mano de obra intensiva. Se estima que hay alrededor de 6.000 PyMES madereras en el país. Con los incentivos correctos para la calidad constructiva y la capacitación de los trabajadores, la construcción con madera puede dar soluciones habitacionales en forma rápida y con alto impacto en empleo.
Por su lado, muchas PyMES del sector han reaccionado rápidamente al contexto y ampliaron la exportación de madera. Una reducción de los derechos de exportación a los productos con mayor valor agregado ayudará a sostener y ampliar las ventas externas de madera rápidamente. “En este caso, se requiere el acompañamiento con financiamiento para capital de trabajo e inversión en tecnología. El entramado empresario y de trabajadores para agregar valor a la madera está vital. Con financiamiento y competitividad, la respuesta es inmediata. Estimamos que las exportaciones de madera pueden agregar rápidamente unos 100 millones de dólares”.
La industria de la celulosa y el papel
Con productos de primera necesidad, las empresas se adaptaron rápidamente para generar ambientes seguros de trabajo y poder mantener la producción flexible a las necesidades del momento.
A pesar de la reacción inicial de la población por papel higiénico, pañales, tissues, nunca hubo faltante de productos. Hubo una rápida adaptación a producir papeles de embalajes, que con el crecimiento del comercio electrónico se hizo imperativo de tener disponible.
Pero este sector de papeles sigue siendo deficitario en el país y es el que puede dar el mayor impacto para empleo en el corto plazo y divisas en el mediano plazo: hay madera disponible para una rápida inversión en una o dos plantas que produzcan celulosa, papeles de embalaje, biomateriales, biomedicina, nanomateriales, textiles, etc. que permitirán generar divisas por más de 2 mil millones de dólares. Si se encara ya, permitiría movilizar inversiones por 3 mil millones de dólares con alto impacto en empleo y expectativas positivas para otras inversiones complementarias.
La actividad forestal es una importante generadora de empleo rural. La actividad está promocionada por la Ley 25080 y sus prórrogas y modificatorias. El financiamiento de la Ley está facilitado mayormente por el acuerdo público-privado Seguro Verde, que es un aporte voluntario de algunas compañías de seguro del 1% del valor de las pólizas de seguro automotor.
El Fondo tiene disponible alrededor de 260 millones de pesos sin ejecutar y posibilidades de mantenerse vigente. La caída de la actividad económica más la falta de pago de los aportes correspondientes a la promoción han reducido drásticamente las plantaciones forestales este año, y con ello, el empleo rural. La Secretaría de Agricultura de la Nación, entidad responsable de la ejecu ción de la Ley, tiene los fondos disponibles y las posibilidades inmediatas de hacer llegar esos fondos que se adeudan a productores forestales y que se pueda seguir plantando. Con esto puede colaborar en mantener (o volver a emplear) a unos 4.000 trabajadores rurales en forma directa este año. Es solo decisión política y gestión. Los fondos y el instrumento administrativo están disponible.
Entidades firmantes: Asociación de Fabricantes de Celulosa y Papel (AFCP); Asociación Forestal Argentina (AFoA); Federación Argentina de Industrias de la Madera (FAIMA); Asociación de Fabricantes y Representantes de Máquinas, Equipos y Herramientas para la Industria Maderera (ASORA).