Así lo consignó un trabajado de FADA presentado en la Pre Asamblea anual de CONINAGRO. Aporta además el 60 por ciento de las exportaciones. BUENOS AIRES (NAP) La cadena agroalimentaria argentina aporta casi el...

Así lo consignó un trabajado de FADA presentado en la Pre Asamblea anual de CONINAGRO. Aporta además el 60 por ciento de las exportaciones.

BUENOS AIRES (NAP) La cadena agroalimentaria argentina aporta casi el 10 por ciento del PBI nacional, que en números representa más de 51,500 millones de dólares, un significativo aporte del sector primario con agregado de valor, consignó el informe “Los números del Campo”, un trabajo de FADA (Fundación Agropecuario para el Desarrollo de la Argentina) que se presentó en la reciente Pre Asamblea de Coninagro. El estudio fue expuesto ante referentes del sector agroindustrial y productores agropecuarios.

El trabajo de FADA, presentado por el economista David Miazzo,  consignó además que  2 de cada 10 puestos de trabajo en el empleo privado a nivel nacional, representa el 22 por ciento del total. Según datos recabados en la Secretaria de Trabajo y ANSES, de esa porción, el 52 por ciento trabaja en relación de dependencia y el 72  por cietno está enmarcado en el empleo formal.

Por otra parte, el sector representa el 60 por ciento del total de exportación de bienes, según el sector externo de INDEC. En tanto que las cadenas agroalimentarias aparecen como el único sector con saldo comercial positivo en aporte de divisas en materia de exportación y el 11 por ciento de la recaudación proviene de la actividad agroindustrial.

Asimismo, el estudio presentado ante cooperativistas de Coninagro remarca que “las economías regionales representan 1/3 de los 3,7 millones de puestos de trabajo que se generan en las cadenas agroalimentarias, y de ese tercio las oleaginosas y cereales aportan 1/4, mientras que la producción de carne y lechería otro 1/4”.

El tipo de cambio de hoy permite que crezcan las exportaciones, estamos en un nivel competitivo, es decir un dólar más alto dañaría aún más el poder adquisitivo.

En otro orden, el informe agrega que: “Las economías vinculadas al campo debemos dividirlas en dos grandes grupos, aquellas con alta inserción internacional, que son las que tienen un 15 o 20 por ciento de su producción destinadas a las exportaciones y se benefician con un tipo de cambio real alto, por ejemplo los limones, bovinos, oleaginosas y cereales.

El otro gran grupo es el que componen las frutihortícolas, la lechería , entre otros, vinculadas al mercado interno, en el que el alza del tipo de cambio, el alza de la inflación contraen el poder adquisitivo de los asalariados y esto detrae el consumo. Mientras el consumo interno siga complicado estas economías estarán rezagadas”, añade.

Los técnicos explicaron en Coninagro que: “El tipo de cambio que tenemos hoy, con el cepo, se empieza a enrarecer y a planchar. El tipo de cambio de hoy permite que crezcan las exportaciones, estamos en un nivel competitivo, es decir un dólar más alto dañaría aún más el poder adquisitivo y un dólar más bajo complicaría las posibilidades de que la producción pueda generar dólares”.

En tanto, añadieron que: “Hasta el tercer trimestre del año pasado veníamos con un déficit comercial, eso nos daba la pauta que el tipo de cambio estaba retrasado. Los últimos 13 o 14 meses hemos tenido una balanza comercial positiva. Va a ser un gran desafío frenar la inflación para que el tipo de cambio se mantenga competitivo, porque a medida que la inflación va ´comiendo´ el tipo de cambio, son necesarios nuevos saltos nominales del valor del dólar, lo cual desestabiliza la economía”(Noticias AgroPecuarias).

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